Wide Open Nature
Un espacio moderno y orgánico
De estilo moderno, sobrio y minimalista, en medio de uno de los pulmones de la ciudad se encuentra esta casa que se mezcla con la naturaleza del bosque que la rodea. Sus dueños la construyeron desde los cimientos bajo un concepto de continuidad.
Desde sus inicios sabían cuál era el sentimiento que los espacios y el ambiente debían provocar, para ellos y para sus invitados. El concepto abierto estilo loft permite que entre una gran cantidad de luz que baña la sala decorada con muebles de colores tierra y neutros para evocar la naturaleza. Sobe la chimenea, se despliega un tapiz largo de fibra natural entretejida, creado de bambú lo que da un toque de color y una textura distinta al ambiente.
“Nuestro objetivo principal es que se pueda tener la sensación de que todo sigue…parece que todo fuera un solo ambiente”.
El arte que decora los ambientes son apenas unas cuantas piezas que le dan vida al ambiente por la excelente elección de color.
La sala es un espacio de doble altura, sin embargo, de ningún ángulo se logra ver el área de las habitaciones en el segundo nivel que se creó de esa manera con el propósito de resguardar la privacidad del área familiar. La iluminación se da por la cantidad de ventanas que sustituyen a las paredes, sus puertas de vidrio que dan al jardín y la piscina, se abren completamente y se guardan dentro de un espacio de pared, para que queden escondidas y no interrumpan la visualización del concepto de continuidad.
De la misma manera se abre el espacio que separa el comedor con la cocina. De esto cabe mencionar el detalle que decora la estructura con el mismo patrón que se creó en la pared del comedor, un juego de líneas simétricas que le da la misma armonía al área social. Dicha puerta está creada con distintos paneles de vidrio que dejan pasar la luz de la cocina y que no permiten ver lo que está sucediendo detrás, con la finalidad de guardar la privacidad del comedor al momento de tener invitados. La cocina es un espacio organizado visualmente, la refrigeradora y demás se encuentran escondidos detrás de las puertas de los gabinetes, ya que de esta manera “se cuida la imagen y se guarda el orden, es importante porque es lo que los invitados están viendo”.
El juego de comedor es una pieza maravillosa Chippendale, con detalles esculpidos en la madera que simulan la garra de león sobre una esfera que es original del diseño inglés. Debajo de la mesa descansa una alfombra de color celeste que fue traída de Ankara, Turquía. De un ángulo se puede apreciar un color más oscuro, y del otro extremo aparece un estampado finamente bordado a mano, un efecto que provoca el pelo de angora.
Sobre la mesa cae una ejemplar espectacular: una lámpara de vidrio de Murano importada desde Italia. De una base cromada cuelgan hilos metálicos que sostienen cada una de las burbujas de vidrio, que por su complexión cóncava, logran reflejar la luz sobre toda la habitación.
A un costado de la cocina se encuentra una fonola de los años cincuenta que los dueños compraron en su Argentina natal, en la ciudad de Buenos Aires. En una pieza cuyo valor se encuentra en los trazos finos y delineados de las figuras que bailan tango dibujados sobre el panel de madera. Todo es pintado a mano, incluso la marquetería, “Argentina no tiene muchas antigüedades, por eso le damos valor a las europeas”, nos cuentan sobre los muebles de la casa, ya que tienen algunos que han adquirido en los distintos países en que han vivido.
Fue por esta razón que el decorador Juan Carlos Rizo de Antología, se encargó de darle unidad a la casa.
“El gusto de nuestra casa es moderna y cálida. Juan Carlos le vino a dar esa validez que buscábamos”.
Es por esto que encontramos elementos como las vigas negras de metal, que se dejan ver en el marco de la puerta que da hacia la piscina para lograr hacer que se integrara con la parrilla argentina diseñada por el dueño. Esta área está acompañada de una barra creada con micro cemento, ya que sigue siendo moderno, pero evita la textura fría del cemento.
El techo de la pérgola tiene un volado de paneles de vidrio que no interrumpen la entrada de luz, y evita que la lluvia se entre, lo que hace un área para disfrutaren todo momento. Es aquí donde tienen una pequeña sala blanca, con un brasero en el centro y decorada con cojines diseñados especialmente para ellos, con algodón guatemalteco y tejidos en Atitlán.
La piscina es de un tamaño ideal. Está creada con un mosaico verde tornasol, y se calienta con la luz sola de los paneles que están colocados en el techo. Basándose en su pasión por la naturaleza, fue que decidieron incorporar una piscina al área social, “el agua da vida, es movimiento. Queríamos agua cerca de la casa, pero no dentro, y así escogimos el lugar para la piscina”, nos cuenta la dueña.
El área de la piscina, tanto como el resto de los espacios sociales, son la combinación perfecta de modernidad minimalista, y la tradición argentina que guardan. Desde la parrilla hasta las antigüedades, esta casa refleja mucho de sus anfitriones. Al igual que la personalidad de ellos, resulta ser un espacio acogedor, cálidos y a gusto.
WIDE OPEN PICK’S
Por Lourdes Galindo
Fotografía: Pepe Valenzuela
