Woman to Watch: Margarita Delgado
El mundo natural y sus bondades nos hablan con ejemplos prácticos que se pueden aplicar a nuestra vida. Nos muestra que las semillas más pequeñas, y para algunos insignificantes, pueden llegar a florecer con fuertes semblantes y dar frutos. Enseña que los cambios son bruscos e inesperados, pero que hasta las flores más débiles pueden recuperarse y recobrar la compostura si se encuentran enraizadas correctamente. Y que los aires frescos, al final, vienen de todas las direcciones sin interrupción.
Margarita Delgado es una apasionada de la naturaleza y la utiliza como inspiración. En lo más privado de sus días la encontraríamos en su jardín sosteniendo una taza de café mientras supervisa el avance de sus plantas. Esto no sin antes dejar a sus hijos en la parada del bus y hacer los preparativos para el día desde las 5:00 a.m.
Cuando va de camino al trabajo juega con la idea de crear una franquicia, contagiar a más personas que crean en El Piñatón, una empresa que organiza fiestas de cumpleaños, quince años, bodas, entre otros eventos.
Como un relámpago ataca el pensamiento que sugiere lo difícil que es replicar el cariño que ella le pone a todos los eventos, el aprecio que le tiene a sus clientes grandes y pequeños y las ganas de seguir nutriendo las amistades que se han forjado con el tiempo. “Me gusta hacer feliz a mis clientes. En este tiempo he tenido el privilegio de ver crecer a muchas familias. Desde su boda, pasando por bautizos y primeras comuniones; hasta los quince años y luego bodas”.
“Me llena poder asesorarlos como si fuera mi fiesta, algo sobrio, simple y elegante”, comentó.
Margarita estudió Horticultura Ornamental y Administración de Empresas, algo que le ha permitido convertirse en lo que es hoy. Pero a pesar de preparase, se topó con algunos obstáculos que fortalecieron el negocio. “Pensé que iba a tener más tiempo libre. Al principio me frustraba cuando las cosas no funcionaban, pero mi esposo me apoyó en pulir los procesos y ahora funciona como una pequeña máquina de relojería suiza en lo que respecta al manejo de inventario y logística. Desde entonces me he dedicado a innovar continuamente en telas, muebles y accesorios”, dijo.
La idea nació a partir del nacimiento de su tercera hija pues deseaba tener más flexibilidad con su tiempo para atender las necesidades de la familia. Este año cumplen 15 años. La idea de más tiempo no se cumplió ya que trabaja más que antes, pero la satisfacción es mayor.
Fuera de las reuniones, Margarita es una mamá, esposa, amante de la cocina y la simpleza en la vida.
“Estoy involucrada en el colegio de mis hijos como Madre de Grado. Me gusta ser una mamá participativa, por lo que ayudo a coordinar las actividades del colegio”, mencionó.
Al final de todo ella regresa a ser la mujer simple, con los pies en la tierra, práctica y privada como a ella le gusta describirse; demostrándonos esa conexión innegable con la naturaleza y sus seres queridos.