YOGA FOR KIDS
Conoce los beneficios que tiene para un niño practicar yoga desde pequeño
Por: Trinidad Castellanos
El yoga es una ciencia integral, un conjunto de técnicas, desde la más sencilla hasta la más compleja, en donde mente, cuerpo y espíritu forman una unión que ayuda a crear salud, bienestar, fuerza y flexibilidad en las personas que lo practican. Las posturas, o asanas, son practicadas por individuos de todas las edades, desde niños hasta ancianos, en muchos estados diferentes de salud y forma física. Las actividades de yoga ayudan a desarrollar la claridad y la precisión, así como a incrementar la creatividad y la imaginación de una forma divertida y saludable.
El yoga para niños posee una dinámica diferente a la de adultos, ya que los niños aprenden mejor cuando se divierten y por eso; las clases de yoga están llenas de magia, juegos, historias, viajes, canciones y por supuesto posturas, las cuales se llevan a cabo, casi siempre, en forma de animales. Aquí los niños aprenden sobre muchas culturas, la diversidad de la naturaleza y la importancia de cuidar el medio ambiente, aprendiendo a conectarse con su entorno a través de la meditación y conciencia plena. Los niños que practican yoga son capaces de regular sus emociones, manejar el estrés y calmarse a sí mismos, por lo mismo, hoy en día son cada vez más los colegios que incluyen dentro de sus clases ejercicios de yoga.
En las clases de yoga, uno de los aspectos más importantes que se trabajan en los niños es la afectividad y fuerza emocional. Aquí se enseña la auto aceptación y el amor hacia uno mismo. También la empatía hacia los demás, que contribuye a que sean niños con fuerza interior, compasivos, generosos y respetosos.
En el aspecto físico, se fortifican todos los sistemas corporales: esquelético, nervioso, circulatorio, digestivo, respiratorio, hormonal y muscular; y se expande el conocimiento de anatomía. Por otro lado, se da una mayor flexibilidad en la columna vertebral y articulaciones, así como también mejora la respiración, el equilibrio, regula los patrones del sueño y aumenta los niveles de energía.
Si observamos el yoga desde afuera, puede parecer solamente una práctica de relajación y flexibilidad, pero hacia adentro del cuerpo hay muchos otros resultados que pueden favorecer al niño en crecimiento. Las poses del yoga estiran la columna vertebral, extienden las extremidades, presionan los órganos y calman la respiración.
Una de las cosas más hermosas que se puede ver en el yoga para niños, es ver a los pequeños sentados con las piernas cruzadas, con los ojos cerrados, en profunda meditación; están totalmente pacíficos y cuando meditamos, nos conectamos plenamente con nosotros mismos y se aprende a vivir en el momento presente, en el aquí y ahora. Cuando introducimos a los niños en la meditación a una temprana edad, les ofrecemos los medios más increíbles y poderosos para hacerle frente a muchos retos de la sociedad y de la infancia. Se puede afirmar que la meditación activa el sistema nervioso parasimpático, en donde la respiración y el silencio de los pensamientos producen calma.
El yoga une cuerpo, mente y espíritu a través de muchos ejercicios de respiración, meditación y posturas, sirve como terapia complementaria para problemas de aprendizaje, motrices, emocionales, físicos e incluso de enfermedades respiratorias y cardiovasculares. El yoga para niños tiene que ser un espacio alegre, en donde los niños se diviertan, jueguen y aprendan. Una clase de yoga jamás será un lugar monótono y aburrido en donde la magia no esté presente.
*Fotografías: Servicios