MEN TO WATCH: LEO BIANCHI
Creador de un espacio de diálogo entre artistas.
“Está en nosotros utilizar la creatividad y los valores de tal manera que logren aportar para lo que es genuino e importante para uno mismo y así compartirlo con los demás”.
“El arte no tiene que ser estéticamente agradable para todos, lo importante para mí es que la obra trascienda y estimule los sentidos.” Este paradigma ha sido un dilema que Leo está actualmente intentando romper y que a su parecer se encuentra grabado en gran parte de nuestra sociedad. “Para poder considerar una obra de arte como buena, no solo se debe enfocar en la técnica, sino que también, en lo que te transmite la obra y la historia del artista. Pienso que como admiradores de arte, debemos indagar más al ver una obra y profundizar en el proceso de su creación”.
El joven artista estudió arte en la Universidad de Loyola en Nueva Orleans y luego recibió clases libres de fotografía y escultura del cuerpo humano en Barcelona, España. “Cuando me fui de Guatemala, no pensé en regresar y mi familia pensaba igual”, nos cuenta Leo quien recientemente se encuentra en el proceso de emprender varios de sus mayores retos en su país natal. “He aprendido amar a Guatemala, un país virgen donde hay oportunidades ilimitadas para evolucionar en cada campo. Está en nosotros utilizar la creatividad y los valores de tal manera que logren aportar para lo que es genuino e importante para uno mismo y así compartirlo con los demás”.
A Leo no le gusta limitarse ni especializarse únicamente en una rama artística, lo que desea es expresar su gusto por la creatividad de diversas maneras; desde el diseño, dirección de arte, la fotografía y la escultura entre otras. La motivación que lo llevó a estudiar arte y a enfocar su vida en esta disciplina fue: “La expresión que podemos llegar a tener a través del arte y lo que se puede llegar a decir sin palabras a través de una imagen. Todo aquello que transmites a través de un objeto; sobre una sociedad, idea o una cultura”, nos explica.
Leo nos cuenta sobre cómo a combatido desafíos encontrados viviendo y emprendiendo en Guatemala. “Para mí no es importante etiquetar a las personas, yo estoy conforme conmigo mismo, sé quien y como soy, no hay nada más importante que esto y las cosas que hago en este mundo. Me ilusiona el movimiento inevitable que conlleva el crecimiento de nuestro país. Guatemala está cambiando. Sé que este planeta es tanto mío como de todos ustedes, estamos compartiendo este espacio, esta oportunidad, juntos. Debemos respetarnos, apoyarnos y hacer cambios verdaderamente importantes, bien intencionados, seamos un ejemplo, honestos y cultos”.
Casa Llerandi
Según nos cuenta el artista y entrepeneur, lo más difícil al empezar este proyecto de Casa Llerandi, el cual lleva 10 meses, fue luchar contra la ansiedad sin saber qué esperar y qué tanto arriesgarse. “La casa fue construida por el arquitecto Raúl Minondo Herrera en los años cincuenta, lo que le da un valor agregado al espacio. Era de mi abuelito, mi Nonno, quien representa excelencia para mí y ha sido siempre una gran inspiración”. Fue así como surge el nombre de Casa Llerandi, un centro cultural que ofrece distintos espacios como una galería y academia de arte donde se imparten diferentes cursos con profesores que quieran brindar un enfoque libre y alternativo.
La galería de arte llamada Mú Mú, tiene el objetivo de ser un espacio que impulse las diferentes ramas del arte e ideales de esta generación. Paralelo a esto, Leo ha desarrollado el restaurante Míta Míta, que lleva el apodo de su bisabuela de 95 años, además de hacer alusión a un concepto de fusión de cocina italiana-japonesa. El restaurante es otra fuente de creatividad para Leo ya que tuvo gran parte en la creación del menú y diseño general de las áreas. Leo se asoció con el diseñador Luis Carlos Quintana para la reapertura de la tienda Morena, un concepto para promover el diseño Guatemalteco. Todos estos espacios se unifican a través de la idea de adherir diferentes espacios que propicien el arte.
“Algo que me gustaría que cambie en Guatemala es la forma de compartir entre nosotros. La gente no comparte suficiente, muchas veces los diseñadores y artistas tienen miedo de que les roben sus ideas y de esta forma se cierran al privilegio de poder aprender, sentir y abrirse a todas las experiencias e información que está a sus alrededores. Tanto en el arte como en la vida es importante confrontar miedos, miedo de ser o no ser el único en tu campo, luchar contra los estereotipos, contra las fobias a creencias distintas a las tuyas. Casa Llerandi es un lugar de encuentro para artistas nacionales e internaciones donde puedan expresarse libremente”, nos explica Leo.
“Siento una responsabilidad y un deseo de colaborar por medio de la comunicación del arte a la cultura y educación de la apertura guatemalteca de toda clase social, raza y sexo”.
Este centro cultural es un concepto de nuestra cultura y de la importancia de la comunicación a través del arte en nuestra sociedad. Además, Leo nos explica que Casa Llerandi es un tributo a todos aquellos artistas y el talento que emerge en el país. Bajo este concepto también se eligió la decoración del restaurante: desde las lámparas, los cuadros y decoraciones; hasta la colaboración con artistas y diseñadores guatemaltecos como Mauricio Contreras (quien realizó el muro de la entrada), Eny Roland Hernández (quien creó la fachada de la casa) y Marca Morralito (quien fabricó las lámparas sobre la piscina que forma una parte integral del restaurante Míta Míta).
Para Leo: “Que existan espacios como La Erre, Proyecto Poporopo, CCE, Vaho Arte, El Atico, Casa Llerandi, entre muchos espacios más, todos con un movimiento artístico y auténtico, en conjunto con nuevas revistas de arquitectura, arte e industria de moda como la es LOOK; son pequeños pasos que juntos están haciendo una diferencia en la sociedad y están empezando a romper varios estigmas sociales”.