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Cómo manejar la enfermedad y tratamiento de un niño con cáncer y su relación con los demás hermanos y familiares.
Por: Maria Andrée Neumann
El cáncer en los niños es la enfermedad más temida por todos los seres humanos. No se conocen cuáles son las causas de la mayoría de los cánceres infantiles, sabemos que existen ciertas cosas que llamamos “factores de riesgo” que afectan su probabilidad de padecer algunas enfermedades, pero no con claridad; por eso lo principal es no echarte la culpa que provocaste esta enfermedad, si tienes estos pensamientos trata de enfocarte en cuidar a tu pequeño, tanto físicamente como emocionalmente. Es muy importante no ver el cáncer como un castigo por cosas que hayas o no hayas hecho en el pasado.
Enterarse de un diagnóstico de cáncer representa muchos cambios para el pequeño y sus familiares que están alrededor. Surgen muchas preguntas cómo, ¿cuáles son las mejores opciones de tratamiento?, ¿le dolerá el tratamiento?, ¿cuánto tiempo durará el tratamiento? Todas estas preguntas son normales, pero hará que tu ansiedad disminuya si le preguntas al médico tratante. No tengas miedo de preguntar, estás en tu derecho. Lo primero que se aconseja hacer es informarse acerca del tipo de cáncer que fue diagnosticado, ya que tienen algunas similitudes; pero pueden ser diferentes en la manera en que crecen, se propagan y se tratan.
Es natural experimentar sentimientos de incredulidad, impacto, miedo y enojo. Estos sentimientos utilizan una gran cantidad de energía mental y pueden incluso hacer más difícil asimilar la noticia, tómate tu tiempo; cada persona lo hace en su propia forma.
A medida que pasa el tiempo debes actuar por el bien de tu pequeño. Puedes comenzar por informarte sobre su tipo de cáncer y tratamiento, puede que te ayude a tener una sensación de control sobre lo que está sucediendo. Ayúdalo a que exprese lo que siente, físicamente y emocionalmente.
Solo tú sabrás comunicarle a tu pequeño esta noticia, sin embargo, la manera de reaccionar de un niño a una noticia perturbadora depende de cómo los padres manejen la situación.
Recuerda que si los niños no reciben respuestas honestas a sus preguntas, lo que ellos imaginan puede ser peor y provocar que se alarmen más. Tanto los adultos como los niños pueden aprender a enfrentar el cáncer y sus tratamientos.
El cáncer muchas veces afecta los roles y la dinámica familiar. Se deberá hablar con todos los miembros de la familia para formar un equipo y cooperar juntos. Seguir haciendo las cosas que solían hacer juntos como juegos de mesa, salir a pasear. Estas son formas saludables y divertidas de compartir en familia. A los hermanos deberás de explicarles que tiene una enfermedad y que habrán veces en donde necesitará ayuda, pero que no es diferente a ellos; esto evitará que tu pequeño se sienta inútil.
Licda. Maria Andrée Neumann
Teléfono: 54829498
Psicóloga Clínica
