Wedding 911 : La inundación

La inundación

“Para que un evento se lleve a cabo, necesitamos de muchísimas personas, las cuales vamos involucrando durante el proceso de acuerdo a su calidad, profesionalismo y responsabilidad. Al trabajar con distintos proveedores, hay que saber delegar y elegir al equipo adecuado. Sin embargo, existen factores externos que nos impiden tener el control de todas las cosas, de ahí la importancia de tener la capacidad de resolver. Resolver se vuelve una característica importante en nuestro trabajo. En una oportunidad, el manteado tensado empezó a tambalearse debido al fuerte viento en un jardín de Antigua Guatemala. Si ese manteado no se corregía, podría reventarse y se pasaría llevando con él, todos y cada uno de los arreglos de mesa, y por ende, se destruiría todo el montaje. Decidimos llamar al proveedor para que llegara a resolverlo. Sin darse cuenta, al martillar los clavos del manteado, reventó una tubería provocando que el lugar comenzara a inundarse. Nuestra reacción fue cerrar las llaves de agua por unos instantes en lo que lográbamos conseguir la pieza para reconstruir la tubería dañada. Durante ese tiempo sacrificamos los baños y tuvimos que desviar a las personas hacia otros sanitarios que, por suerte, quedaban dentro del mismo espacio. Al poco tiempo se corrigió la tubería dañada gracias a un contacto y experto en la materia que logramos conseguir”.

 

Layla y Dania Abed planifican bodas desde hace 5 años, conocen la importancia de tener iniciativa, experiencia y capacidad para resolver inconvenientes que puedan suceder antes, durante y después de un evento. Existen muchos elementos que les apasionan de su trabajo, pero si tuvieran que elegir uno sería, “ver la reacción de las parejas el día de la boda. Cada detalle se elige con tanta ilusión que ver llegar el momento es algo increíble. Nos sentimos honradas de verlo junto a ellos. No olvidamos las expresiones de los novios cuando ven a la novia caminar hacia ellos, algunos más expresivos; otros, menos, pero las reacciones son únicas. También, estar al lado de la novia y su papá segundos antes de ingresar a la ceremonia, listos sólo para indicarles cuando empezar a caminar. El poder sentir las emociones de la novia de cerca, ver la felicidad en su sonrisa temblorosa. Esto es lo que más nos apasiona. Al final, toda la coordinación y los detalles se resumen en vivir ese momento”.

 

Layla y Dania Abed Born to #Celebrate

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