Estefanía de Ros
Diseñadora de interiores y Objetos de diseño
Ciudad de Guatemala
¿A qué te dedicas? Soy cofundadora de Agnes Studio, un estudio de diseño multidisciplinario donde vemos diferentes áreas: diseño interiores, muebles y objetos.
¿Qué significa ser mujer para ti? Es sabiduría y conciencia acumulada por nuestras generaciones anteriores que nos hace seres inteligentes, multifacéticos, generosos, apasionados y valientes.
¿Qué significa ser chapina para ti? Para mí ser chapina es verle el lado positivo a las cosas y a las personas. Es ser ingeniosa, creativa y curiosa, es tener un país lleno de lugares hermosos con diferentes culturas, realidades, lleno de colores y gente genuinamente buena.
¿Qué crees que tienen las mujeres guatemaltecas que no tienen otras mujeres? La mujer guatemalteca es apasionada en lo que hace y tiene muchas facetas tanto para emprender como para enfocarse en su familia. Ellas están orgullosas de su cultura y tradiciones, expresándolas en diferentes aspectos de su vida y contagiando de energía positiva a las personas con las que interactúan.
Nombra a una mujer que admires. J. K. Rowling
¿Qué es lo que no puedes encontrar en otra parte del mundo y encuentras en Guatemala? Tenemos un ecosistema de biodiversidad lleno de flora y fauna, nuestra biosfera maya es única. Es importante cuidar de nuestro medio ambiente, tener conciencia de los actos y las consecuencias que puedan repercutir en él.
¿Qué querías ser cuando eras niña? De niña me gustaba la moda y la fotografía. Siempre me he inclinado por crear. Al principio quería ser fotógrafa, luego tuve oportunidad de viajar y regresé al país sabiendo que quería ser diseñadora de interiores. Me di cuenta del impacto que tienen los espacios en las personas.
¿De cuál de tus talentos te sientes más orgullosa? Tengo la parte de visualizar los espacios. Soy una persona curiosa, he entrenado mi ojo.
¿Qué es lo que más te inspira de tu trabajo? Me apasiona crear nuevas cosas y verlas tomar forma, en general todo el proceso. Ver cómo las personas interactúan o reaccionan ya con el producto final es muy satisfactorio.
¿Cuál ha sido el reto más fuerte con el que te topaste? No tener miedo a hacer cosas diferentes y enseñarle al cliente otras opciones aunque tal vez no sean las más usuales, aunque sean materiales que normalmente no se utilizan en Guatemala.
¿Qué te impulsó a seguir en los momentos más difíciles? La construcción (cuando intervienes arquitectónicamente: colocar concreto, la loza, los acabados, tal vez no son los correctos, por ejemplo) es difícil y al principio, no sabes muchas cosas. Te encuentras con dificultades, pero es parte del aprendizaje. En cada proyecto aprendes y sigues adelante porque es lo que te encanta hacer.
