Cómo el ejercicio optimiza la salud mental y la felicidad
Por: Mónica Viejo
Estudios recientes de la Universidad de Yale y Oxford demuestran que la actividad física podría ser una alternativa natural y segura para combatir la depresión, el trastorno de salud mental más prevalente del mundo.
Se estima que el 25 por ciento de la población mundial padece de uno o más trastornos de este tipo durante su vida. Y, aunque la mayoría se somete a psicoterapias o toman antidepresivos, los estudios revelan que el ejercicio puede ser una forma muy eficaz para prevenir y combatir la depresión, la cual, según la Asociación Mundial de Psiquiatría, será la enfermedad mas frecuente en el 2020, por encima de las cardiovasculares y el cáncer.
Según varias investigaciones, este tipo de actividad promueve el crecimiento de nuevas células cerebrales, refuerza la autoestima, fortalece la respuesta bioquímica del organismo al estrés e incluso hace un contrapeso al riesgo genético de desarrollar éste u otro tipo de trastorno mental.
Los expertos afirman que el ejercicio imita, en cierto modo, los efectos químicos que producen los antidepresivos, ya que éste sirve para regular el apetito y los ciclos de sueño, y, además, elimina los pensamientos negativos, lo que ayuda a disminuir los síntomas de la depresión.
Es importante aclarar que no por hacer mas ejercicio se es más feliz. Lo ideal es ejercitarse entre tres y cinco días a la semana, en sesiones que tengan como duración entre 30 y 60 minutos.
El motivo de la felicidad
Puede que te preguntes ¿qué pasa con nuestros cerebros cuando hacemos ejercicio? Éste conduce cambios en el cerebro a través de la creación de nuevas vías neurales y el aumento del flujo sanguíneo y hormonas como las endorfinas, la serotonina, la dopamina y la testosterona, las cuales se liberan al incrementar nuestra actividad física.
– Las endorfinas son la droga natural de la felicidad. Éstas son pequeñas proteínas que actúan como neurotransmisores del placer, eliminando el dolor y mejorando el autoestima.
– La serotonina controla el apetito, nos ayudan a dormir mejor y regula nuestro estado de ánimo. Todos estos factores van de la mano para hacernos sentir más felices, tranquilos y estables.
– La dopamina es esa hormona placentera que crea hábitos. Señala los centros de recompensa en nuestro cerebro que nos motivan a tomar acción y trabajar en lo que nos hacen sentir bien. Gracias a ésta tenemos sentimientos de euforia, emoción y alegría.
– La testosterona es crucial tanto para hombres como para mujeres, es importante para el metabolismo, crecimiento muscular y libido. Sus niveles bajos pueden llevar a la depresión y la obesidad.
No solamente las endorfinas son las responsables de que mejore nuestro estado de ánimo durante el ejercicio. El hecho de vernos mejor, más saludables y llenos de energía provocan que nos sintamos con mayor seguridad y autoestima.
Ejercicio y reducción del estrés
El estrés crónico es un gran factor en muchas de las enfermedades mentales como la depresión y la ansiedad. La presión para satisfacer las demandas de la vida puede resultar en la sobre activación de las hormonas, “luchar o huir”, el cortisol y la adrenalina.
La sobreproducción de éstas durante un período prolongado es la raíz de la mayoría de las enfermedades relacionadas con el estrés. Entonces, ¿qué tiene que ver esto con el ejercicio regular? Bueno, pues libera las hormonas “felices”, antes mencionadas, y contrarresta la sobreproducción de cortisol y adrenalina.
Recomendaciones
El ejercicio aeróbico (correr, Zumba, HIIT y otros cardiovasculares) te ayudará a quemar calorías. Mientras que el entrenamiento de fuerza hará que tu cuerpo sea una máquina más eficiente para quemar calorías, incluso cuando esté en reposo.
Finalmente, mantén una rutina regular de ejercicios y apoya a tu cuerpo para que convierta el combustible (alimento) en energía de manera más eficiente. Las células musculares queman más energía que las células grasas, por lo que hacer ejercicio y construir más masa corporal magra aumenta tu metabolismo.
