CLAUDIA BOSCH
Una madre, mujer y empresaria íntegra en todas sus facetas
En todos los aspectos de la vida, Claudia Bosch se maneja con estilo y positivismo, como empresaria y madre de cuatro. Nos recibe en su oficina con su personalidad amable y fresca. Comienza por contarnos con mucho orgullo sobre sus hijos y la maternidad.
LA BELLEZA DE LA MATERNIDAD
“Primero que nada, soy mamá de cuatro hijos que felizmente están en una etapa adulta. Cada etapa tiene su reto y uno aprende a disfrutarlos en cada una de ellas. Siempre siguen siendo una parte de uno y uno de ellos, pero si algo he aprendido, especialmente ahorita que se casa mi primera hija, es la importancia de gozarse cada una de esas etapas de la vida. Es ir descubriendo junto a ellos. Obviamente uno de madre es el límite, pero es importante aprender a negociar con ellos constantemente para que exista una armonía, para que todos estemos felices y ellos aprendan a ser responsables de sí mismos”.
Poco a poco se va dibujando cada vez más su sonrisa mientras nos comenta el sentimiento que nació en ella al momento de convertirse en mamá: “Te completa. Para mí lo es todo. Esa parte tan esencial que te hace siempre ser mejor. Te llena de muchísimas maneras”. Cada edad tiene sus distintas alegrías, hoy por hoy Claudia goza de sus hijos jóvenes adultos y nos cuenta del rumbo que cada uno ha ido tomando en su vida: “Es muy lindo, porque mis hijos ya se están integrando a un área laboral. Es interesante porque en cada etapa haces un bonding diferente y ahora se trata sobre esa conexión empresarial, ese interés que tenemos en común, que es nuestra responsabilidad y lo queremos hacer bien. Mis hijos son mis socios principales y esto nos ha generado este denominador común de trabajar juntos, ser un equipo, que ha sido importantísimo desde que son pequeños. Nos apoyamos en las cosas buenas, en las no tan buenas y en los aprendizajes que nos toquen”.
“Como madre es importante ser el líder de tu núcleo y enseñar con el ejemplo, especialmente los valores como familia”.
Hace muchos años, una tragedia familiar hizo que el valor de estar juntos y volverse un equipo se unificara aún más. Paul, su hijo, sufrió un terrible accidente a los 7 años, “Sufrió un trauma cerebral muy severo. Estuvo un mes en coma. Mis hijas eran pequeñas. Estuvimos un año en el hospital donde Paul tuvo que aprender todo de cero: a gatear, caminar, hablar de nuevo, todo. Fue uno de los momentos más difíciles que nos tocó vivir como familia, fue lo que nos fortaleció. Yo a mis hijas nunca les tuve ningún secreto, les dije: ustedes son parte importante de este equipo y de las decisiones que vamos a tomar”. Es así como para Claudia, la unión familiar y velar por sus hijos ha sido el motor que ha conducido su vida.
La comunicación es una parte vital para lograr una amistad y un vínculo entre padres e hijos, nos aconseja Claudia. Los límites y la confianza deben ser siempre recíprocas. “Es nuestra responsabilidad ser la guía donde vamos sembrando los valores con los que nosotros mismos hemos crecido y que queremos que transmitan a las futuras generaciones”.
“Esta es la relación más importante de nuestras vidas. Cuando tienes invitados a cenar te preparas tanto, por ejemplo, pero tus hijos son tus invitados de vida, de siempre, son las personas con que más cortés y más correcto tienes que ser. Creo que parte de ser madre es eso, todo el tiempo, porque a veces se te olvida, como es normal. El ejemplo del tipo de vida que uno lleva va sembrando los valores de vida que vas transmitiendo. La base es disfrutarlo”.
“Como mamá soltera mis hijos son mi fuerza, son lo que me hace ser mejor, lo que me hace mantenerme al día y son mis mayores educadores”.
LA VISIÓN DE UNA MUJER EMPRESARIA
Existe otra faceta de Claudia que le da fuerza y pasión por vivir la vida y disfrutarla con todas las bendiciones con las que se presenta. Una mujer empresaria, que después de haberse dedicado por completo a la crianza de sus hijos, introdujo en su vida un nuevo elemento al comprar Casa Palopó, un hotel de lujo a las orillas del lago Atitlán, así como también fundar un business center en el cual están las oficinas de operaciones de su empresa, y donde ofrecen un servicio completo de oficina a distintos empresarios.
“Desde aquí” nos cuenta sobre el bussiness center “vemos toda la logística de Casa Palopó, enviar todos los productos frescos: vinos, carnes, etc., se manda el producto dependiendo de la ocupación. Allá se compra la verdura y todo o que se pueda, incluso las flores, porque para nosotros es muy importante apoyar a nuestra comunidad. Uno de nuestros objetivos principales es poner ese granito de arena en el mundo, exponer que en Guatemala hay cosas lindas y de alguna manera hemos ido logrando hacer presencia afuera”.
Claudia nos explica el nuevo mercado que cada vez más se ve atraído a las maravillas de nuestro país, “todo tipo de turismo es importante. Guatemala ha sido muy conocida por backpackers y creo que culturalmente ya estamos en otra situación como país y ya tenemos otras cosas que ofrecer, además el turista ha descubierto que aquí se puede viajar en familia. La importancia de fortalecer al turismo es que entren más divisas a la comunidad, que es el principal actor en todo esto. Allí hay muchas personas que tienen que trabajar para que funcione. Tenemos además muchísima calidad que ofrecer para un turismo de otro nivel”.
“Casa Palopó es el primer hotel en Guatemala que entra en Relais & Chateaux, una asociación hotelera que es únicamente por invitación”.
“Nosotros tenemos que apoyar a nuestra comunidad dando empleos y que muchas familias puedan crecer con nosotros. Además el comercio alrededor se beneficia. Todos los guatemaltecos tenemos que unir esfuerzos y atraer turismo, hablar bien de nuestro país y decir todo lo lindo que tenemos”. La importancia de la mujer guatemalteca como empresaria y su rol en nuestra sociedad es sumamente importante, así como también fomentarla y apoyarla, “de esta manera estamos ayudandónos entre nosotras y también a la comunidad para tener una sociedad más balanceada en todo sentido. La mujer puede ver el lado más humano y lograr una empatía diferente. Debemos involucrarnos y no tener miedo a estar metidas en cosas de alto nivel. Yo voy a luchar al lado del hombre porque sé que lo merezco de la misma manera. No debería de ser una cuestión de género, tenemos que perder ese tema y al mismo tiempo tenemos que estar siempre seguras que tenemos las mismas competencias, pero tenemos el valor agregado de ser mujeres. Eso nos da una visión, por naturaleza, diferente”.
Actualmente, Claudia se encuentra involucrada en dos proyectos importantes para la sociedad guatemalteca:
BEST BUDDIES
Un programa de amistad que vino a Guatemala desde hace 6 años, “un niño regular crea un vínculo de amistad con un niño con una necesidad intelectual. Muchas veces a estos niños se les dificultan las relaciones sociales, pero existe el mito que dice que ellos no tienen las mismas capacidades o no van a entender y eso es falso. Son perfectamente capaces. Tenemos distintos chapters en diferentes colegios, durante la secundaria. Ellos crecerán para ser adultos autosuficientes y van a ser igual de productivos que cualquier persona”.
AYUVI
En la se apoya a niños con cáncer: “es un hogar a donde van los chiquitos que pasan a un área del tratamiento en el que ya se hizo todo lo que se pudo y de alguna manera no se curaron. Es un programa de calidad de vida para ayudar a sus familias en la transición más importante de sus vidas, dejarlos ir. Cuando yo tuve a mi hijo Paul en el hospital, hice un compromiso conmigo y con Dios de dedicar una parte de mi vida a compartir con las personas lo que yo estaba viviendo. Estos niños son increíbles, luchan con todo para poder vivir. Tenemos una responsabilidad como humanos y debe volverse un compromiso”.
Definitivamente Claudia Bosch es un ejemplo de vida para todas las mujeres, una fuerza maternal y comprometida totalmente al desarrollo actual de la sociedad y de Guatemala.
Redacción por Lourdes Galindo