AMBICIÓN UNA PALABRA TAMBIÉN PARA MUJERES
“Una girlboss no es el tipo de mujer que se trae abajo a otra solo porque sí. Sabe que no es fácil llegar a ese puesto por eso está dispuesta a apoyar y ver de qué manera las demás pueden lograr tener las mismas oportunidades que ella. Ve a otras mujeres como sus amigas, compañeras porque juntas lograrán mucho más”,
-Maria Katschmitt.
María Kaltschmitt, de 33 años y publicista de profesión, encarna a la mujer emprendedora, poderosa, que sabe dirigir y aprender de los obstáculos. Dice tener su alma máter regada en tres universidades Southern Methodist University, Georgetown University y IE Bussiness School. Le enternece cuando una persona ayuda a otra sin conocerla, los animales y el perdón honesto y sincero de la gente. Disfruta reír, “a pesar de tener ascendencia alemana, la risa ha sido parte crucial de mi familia”. Es la más pequeña de cuatro hermanas y está casada. Su papá es su mejor amigo y su mamá le enseñó a esforzarse para lograr sus objetivos, la importancia de la educación y formación.
Es una de las cuatro mujeres que se sienta en la Junta Directiva de la Fundación para el Desarrollo (FUNDESA), imparte cátedras en la Universidad Francisco Marroquín, es una Global Shaper y apoya a la Asociación Estrella de Mar, entre otras iniciativas en las que participa. Respondió para LOOK interrogantes sobre su vida, trayectoria y opiniones sobre los retos que las mujeres enfrentan al querer obtener una cuota de poder.
LM – A lo largo del camino has demostrado que, en silencio, con trabajo duro y sin alardear has ganado los mejores lugares dentro de fundaciones y asociaciones guatemaltecas, ¿puedes ampliarnos el tema?
MK – Sería no humilde de mi parte decir que he ganado esos espacios sola o ignorando de dónde provengo. He sido una mujer que, a diferencia de muchas otras en este país, he sido muy afortunada. Desde pequeña he tenido una formación privilegiada la cual valoro mucho. Asimismo, soy una fiel creyente que uno puede influir más de lo que cree siendo consecuente y coherente con sus principios.
LM – ¿Cómo llegaste hasta donde estás hoy y a qué te dedicas? ¿En qué otros sitios has trabajado?
MK – El hoy es un resultado de lo que hice ayer, es la suma de muchos años de esfuerzo, de desvelo y dedicación de lo que me gusta hacer. Ningún logro o satisfacción llega fácil, siempre es la consecuencia de una serie de esfuerzos continuos, de mucha disciplina y de tener claros los objetivos. Antes de trabajar en Zen Interactive Media, tuve una serie de puestos dentro de empresas que he creado y ciertas a asesorías para otras empresas de comunicación estratégica.
LM – ¿Cómo decidiste iniciar ZEN?
MK – Zen fue el resultado de una visión de continuar innovando en el campo de la publicidad. Luego de la crisis (económica) del 2008 lo primero que recortaron las empresas fue su presupuesto de publicidad. En ese entonces se necesitaban estrategias con menor costo para poder tener resultados y fortalecer la relación con los clientes. Uno de los servicios que más ofrecimos ese año fue la organización de eventos corporativos. Los años pasaron y empezó a tomar mayor relevancia el tema digital. Me di cuenta cómo ciertas agencias continuaban sobreviviendo de los medios tradicionales los cuales, era evidente, venían en declive. Así nació Zen, con la visión de ser una agencia 100% digital dedicada a pensar, ejecutar y crecer solo en este mundo. Después de 5 años puedo decir que fue una de las mejores decisiones que hemos tomado, aunque ahora el reto es permanecer en el negocio con una industria tan cambiante. Hemos cambiado ya dos veces de modelo de negocio para poder sobrevivir en este mundo tan competitivo y dinámico.
LM – ¿Conoces otras mujeres exitosas en el área digital? ¿es común que las mujeres emprendan en esta área?
MK – Sí, conozco a varias, sin embargo, es un campo mucho más de hombres. Cada vez veo a más mujeres y el ejemplo perfecto es justamente Zen, en donde la mayoría de sus trabajadoras son mujeres.
LM – ¿Con qué marcas trabajas y cuál ha sido el reto más grande al que te has enfrentado?
MK – He trabajado con distintas marcas internacionales que van desde McDonald’s hasta P&G. También con marcas nacionales con las cuales me disfruto mucho mi trabajo, por ejemplo, Spectrum y sus centros comerciales. He encontrado retos en todas y cada una de las marcas. El común denominador que he encontrado es el innovar continuamente con ellos, conforme el mundo digital va cambiando, teniendo a mi lado al equipo idóneo para hacerlo.
LM – Eres una mujer líder en el área digital ¿por qué no publicas más seguido en redes sociales?
MK – No me considero para nada una mujer líder en el área digital. Mi expertise es el área de la comunicación en donde las redes sociales hoy juegan un papel muy importante y he tenido que aprender mucho del tema. De hecho, no pasa una semana sin aprender algo nuevo del mundo digital.
Las redes sociales las utilizo para comunicar y generar valor, para visibilizar ciertas cosas que para mí son importantes. Las considero un canal muy efectivo para generar cambios positivos. A mí no me interesa que la gente vea que llevo puesto, a dónde voy y qué como, hay gente que ya hace eso y lo hace muy bien. La moda no es mi fuerte, tampoco. Las redes las uso para construir, tengo la regla personal de no publicar ni comentar nada que ofenda, critique o no construya. Esto es una práctica y un compromiso personal que adquirí desde hace ya varios años conmigo misma. Suficiente tienen los usuarios para leer cosas negativas hoy en día, para que mis redes también sean parte de eso.
LM – La mayoría de los hombres le teme a las mujeres fuertes, ¿cómo has lidiado con el sexismo que has enfrentado ahora o en el pasado?
MK – Yo veo esto realmente como una oportunidad. La mujer ha estado ausente en varios espacios que, regularmente, son conformados por hombres. A las mujeres que tenemos un poquito más de fuerza o una voz más alta se nos oye más y se nos abren puertas en lugares que quizá nunca imaginamos, únicamente por ser mujeres. Siempre hay que verle el lado positivo a las cosas y ser mujer para mí ha sido una bendición en todo sentido.
LM – ¿Qué consideras que hace falta en una sociedad como Guatemala para que las mujeres empiecen a ocupar cargos como los de los hombres?
MK – Considero que las mujeres tienen igual capacidad que el hombre. Su instinto maternal les permite ser buenas multitasker, somos amantes del detalle y contamos con otras cualidades que nos permitirían ocupar esos puestos sin ningún problema. Ahora, ¿qué pasa? Siento que nuestra sociedad aún es muy conservadora, eso sí, cada vez ha ido cambiando. Es por ello que depende más de la mujer en tomar la desición y querer ocupar esos puestos, creerse capaz y tener la voluntad de tan siquiera intentarlo. Poco a poco se han ido rompiendo mitos y esterotipos impuestos por años en culturas como la nuestra.
LM- ¿Por qué razones crees que las mujeres ganan menos que los hombres aún teniendo la misma formación?
MK – Pienso que esto es así no solo en Guatemala, sucede en muchos otros países. Hay sitios donde la mujer está demostrando cada vez que sí puede ocupar estos puestos con mucho más frecuencia, sin ningún problema, y es allí donde hay menores diferencias salariales. En Guatemala como menciono, estamos en una etapa de transición en donde, por opción, y muchas veces de la mujer, luego de haber logrado cierto recorrido académico, deciden ser amas de casa y está bien. Creo que esto ha ido cambiando con el tiempo y lo podemos ver en las difentes generaciones de nuestras propias familias.
LM – ¿Por qué crees que es necesario ser ambiciosa dentro de tu ejercer profesional?
MK – Considero que todas las mujeres deberíamos ser ambiciosas, tenemos todo para poder lograr lo que nos proponemos y hacer nuestros sueños realidad. Las únicas que a veces estamos en medio de hacerlo posible somos nosotras mismas, al pensar en pequeño y no saber que los límites nos los imponemos nosotras. Considero que es necesario iniciar cambiando el concepto que cuando un hombre es ambicioso está bien visto, pero cuando una mujer desea lo mismo se pone en duda y se ve como algo negativo, a veces. Debemos ser ambiciosas, en el buen sentido de la palabra, para empoderarnos y quitarnos los miedos que se nos han impuesto, para poder lograr con fuerza y confianza todos aquello que deseamos. La ambición es una palabra muy poderosa, las mujeres debemos incluirla en nuestras conversaciones y empezar a practicarla para demostrarnos a nosotras mismas que somos capaces de ir más allá de lo que imaginamos.
LM – ¿Qué se necesita para convertirse en una girl boss?
MK – Considero que no hay una fórmula para ser ese tipo de mujer. Sí creo que todas las mujeres pueden serlo y que simplemente es cuestión de determinación y convicción para lograr lo que se proponen. Algo que define a una girlboss es que no puede ser del tipo que se trae abajo a otras solo por que sí. Una girlboss sabe que no es fácil llegar allí y por lo mismo está dispuesta a apoyar y ver de qué manera puede ayudar a otras a tener la misma oportunidad que ella tiene. Sabe que las demás no son competencia, son sus amigas, compañeras y que juntas logran mucho más. Tener a buen hombre a mi lado ha sido clave tambien para poder lograr lo que me propongo.
LM – ¿Qué consejos le darías a nuestras lectoras para sus perfiles en redes?, ¿qué crees que toda mujer de esta década debería hacer?
MK – Qué piensen dos veces antes de publicar o comentar algo. Pretender ser dueño de la verdad absoluta es un error que veo a diario en las cuentas de muchas personas. Que sean consecuentes con sus valores y principios y lo más importante es que estén anuentes a que la realidad que viven es una muy diferente a la de otros. Publicar, comentar o interactuar nos posiciona de cierta manera, la pregunta es simple ¿cómo queremos ser vistos y recordados? Las mujeres deberíamos de usar más las redes para apoyarnos las unas a las otras. Considero importante también cuestionar todo lo que leemos, venga de donde venga. Somos lo suficiente capaces de ser críticos con otros y deberíamos de ser igual de críticos con nosotros mismos. Formar criterio desde las redes sociales es fácil y peligroso. Si de verdad queremos aprender y formar criterio hay que complementar nuestras fuentes de información y dejar de informarnos únicamente desde nuestros círculos sociales.
fotografia EVA ZELENKOVA
modelo MARIA KALTSCHMITT
vestuario PEPA POMBO
joyería SWAROVSKI
