MICHELLE COHN: The Power of Yes
Fotografía: Alfonso Asturias / Maquillaje: Monica Niederheitmann / Vestidos: Rue Cambon Gowns / Joyería: Ara
Michelle Cohn fue una niña más bien introspectiva y tímida. Pasó una parte de su adolescencia admirando a las modelos de programas como America’s next top model e imaginando la posibilidad de llegar a ser una de aquellas chicas. No pasó mucho tiempo para que una marca reconocida la invitara a modelar y fue a partir de eso que aprendió a prepararse y a caminar en la pasarela. Una vez la vieron los diseñadores nacionales, comenzó a trabajar con ellos, sobresaliendo en la semana de la moda. Sin embargo, al inicio este no era su único sueño. A los 17 años, cuando estaba por terminar el colegio, Michelle se veía a sí misma estudiando leyes y dedicándose a la abogacía. Pero ese mismo año su familia se vio afectada emocional y económicamente pues a su madre le detectaron cáncer. Fue así como los planes cambiaron y el destino la llevó a buscar otras alternativas, entre ellas la comunicación. En un inicio, tomó cursos de conducción televisiva con el propósito de superar su timidez y desarrollar la capacidad de hablar en público. No esperaba dedicarse a eso. Ahora es presentadora y conductora de eventos.
Michelle también decidió desde joven que quería formar una familia, y a los 21 años se convirtió en mamá. Esto conllevó críticas de personas a su alrededor, quienes le aseguraban que no podría seguir desarrollando su carrera. Su esposo, que entonces tenía 24 años, también tenía claro que quería seguir desarrollándose profesionalmente y haciendo realidad sus sueños. Fue así como ambos se dispusieron a demostrarse a sí mismos y a otros que podían hacerlo. Este proceso, cuenta Michelle, no ha estado libre de desafíos pero le ha enseñado muchas cosas. Sobre todo, la ha hecho madurar en muchos sentidos.
Hoy es reina de belleza y representa a Guatemala en certámenes internacionales, un ambiente en el que por muchos años existió un estigma contra mujeres casadas y con hijos. Michelle escuchó comentarios duros, como que ella no tenía el derecho a estar allí o que le estaba quitando el puesto a alguien que sí lo merecía. Pero la carrera de modelaje, en general, está llena de retos y Michelle ya ha aprendido a asumirlos y combinar su trabajo con la maternidad y la vida familiar. Ser una persona organizada con una habilidad especial para la logística ha sido clave para ello, pero también el apoyo incondicional de sus padres, hermanos y esposo.
Para Michelle, representar a Guatemala en Miss Universo 2023 implica una gran responsabilidad pues reconoce que llegar allí es un privilegio al que pocas tienen acceso. No se trata solo de tener un físico particular sino de la capacidad de liderar, inspirar e influir. “Los concursos de belleza no son algo superficial”, dice, “no solo se califica la belleza física… Miss Universo busca mujeres con una historia a través de la cual puede transformar la vida de otras”. Se trata de una plataforma, entre muchas, que resalta la importancia de tener una voz y con la capacidad de hacer que diversas voces sean escuchadas. Uno de los mensajes más importantes, opina Michelle, es que las mujeres podemos ser y hacer muchas cosas y lograr lo que nos proponemos.
A partir de la experiencia de la maternidad –Michelle tiene ahora dos hijos– su perspectiva de la vida cambió radicalmente. Antes se consideraba una mujer un poco fría, le costaba expresar sus sentimientos debido a su timidez, pero sus hijos abrieron en ella un flujo constante de comunicación y amor. Ahora, apunta, es más consciente y segura de sí misma, percibe la vida con mayor gratitud y en general se siente agradecida de lo que ha pasado y lo que tiene aunque algunas cosas no hayan sido fáciles. Por otro lado, mirar crecer a sus hijos le ha dado el regalo de valorar más el tiempo presente, a estar en el ahora sin ansias por el futuro o tristeza por el pasado.
En su día a día, Michelle se guía por la frase “no dejes que los aplausos lleguen a tu cabeza ni las críticas a tu corazón”, lo que le recuerda la importancia de mantener los pies en la tierra y seguir cultivando un fuerte sentido de humildad. Esta visión engloba lo que ella ha vivido a lo largo de su vida, y en especial su carrera como modelo, y lo que le aconseja a otras mujeres que buscan enfocarse y trabajar duro para alcanzar sus metas: que no escuchen las críticas negativas que puedan alejarlas de lo que quieren lograr. La combinación de confianza en una misma y esfuerzo son clave para vencer las dudas sobre las propias capacidades e ir avanzando con decisión.
